en el n. 109 del semanario hildebrandt se aprecian fácilmente
las incoherencias en las que, de vez en cuando, incurre este periodista
que, en general y pese a todo, es lo más aceptable entre los especímenes de
esta fauna que hay en exhibiciión
hay dos artículos muy buenos (el de David Roca Basadre y el
del director) y, como siempre, varias noticias importantes e impactantes
de éstas, la principal es:
TIROS DE DESGRACIA. Ante la provocación de los exaltados, el gobierno de Ollanat Humala respondio
con balas y detención de autoridades populares... Esperamos que, tras la frágil calma impuesta
por dos muertes y un centenar de heridos...
además, menciona la “detención”
del Alcalde Oscar Mollowanka (p. 6)
NO, Herr hildebrandt, NO intentes justificar los ASESINATOS, una protesta NO es una “provocación de exaltados”
que DEBA SER contestada a balazos
esos hermanos nuestros (NO tuyos, por supuesto) están defendiendo su medio ambiente, sus
tierras y sus agua; están defendiendo
sus vidas y las de su descendencia
ala larga, están defendiendo NUESTRAS vidas (quizás no la
tuya que podrías volverte a tu PM, tu
patria madre, es decir) y, más ala larga
aún, están defendiendo la vida de la humanidad y el futuro humano
{entiendes esto o es
que se te escapa algún hitlerbandido
que, a veces, pareces esconder bien en tu adentro y crees
que las protestas populares “provocan”, automática y justificadamente, la respuesta asesina de las
balas?}
pero el DEBE de este dichoso n. 109 es aún mayor, allí también se afirma que el Alcalde fue
“detenido” y que “no hizo mucho por
evitar la violencia” (p. 7)
lo último está en abierta contradicción con lo que leemos el
vocero más autorizado y mejor informado
de la reacción (y el más “serio”
apologista de la represión): Policía
hiere al Alcalde de Espinar cuando intentaba
calmar a la población que protestaba contra la minera (25-5-12,
p. 1)
así pues, en tu información, es falsa; pero hay más, el
Alcalde NO fue detenido, fue SECUESTRADO.
Y este secuestro se agrava más
porque los “detenidos” fueron llevados NO a una comisaría, sino a unos locales
de la minera y, luego, el Alcalde Mollowanka, fue trasladado a Ika
es decir, la benemérita y heroica police ataca a la
población y al Alcalde a balazos y perdigonazzos y luego secuestra a todos los
que puede y, el secuestro del Alcalde se torna una espectacular via crucis:
spinarmanta Josjoman; Josjomanta
Ikaman
este secuestro recibió el repudio general de la población y
de las instituciones que aún mantienen un minimum de dignidad, como el de la
COMISIÓN DE JURISTAS
CONTRA LA CORRUPCIÓN
Y POR LA
DEFENSA SOCIAL y el de algunos Colegios de Abogados
el Colegio del
Josjo, de inmediato
y el Colegio
de Lima que, más adelante, estuvo dispuesto a asumir la defensa del
Alcalde Mollowanka
en cuanto ala población, la de espinar estuvo en intensa
agitación con movilizaciones continuas; en Josjo, el martes cinco hubo una
multitudinaria marcha de protesta en la que ocupamos casi toda la av. el Sol y
donde se corearon lemas como los de la protesta
de AntaWaylas (en la que
participé y por lo que “pagué” con casi cinco años de cárcel): “el pueblo unido...” o
“urgente, urgente, nuevo presidente” y otros nuevos como: “u-mala,
garcía, la misma porquería”
la presión popular y la institucional fue tanta que el
DESgobierno que sufrimos dio marcha atrás
pero, sigamos con el semanario, mencionamos un artículo de
hildebrandt (el “auténtico”?)
cuyo título está en primera plana
(TRAICIONAR
TAMBIÉN ALIENTA LA VIOLENCIA)
y que aparece con un título ligeramente cambiado: VIOLENCIA
TAMBIÉN ES
TRAICIONAR (pp. 10-1)
muy apropiadamente, ese artículo se adorna con una foto en
la que aparecen lo que parece ser una perfecta pareja de “godfather
& godson”; la leyenda de la foto: el futuro
diferente de la gran transformación
lo que sucede es muy claro:
1. hay una TRAICIÓN; 2. la traición
en sí, ya es violencia; 3. esa
violencia provoca la respuesta de un
pueblo, protesta expresada en manifestaciones
o marchas populares; 4. esa
respuesta “provoca” la respuesta de las balas asesinas
una protesta que, además, está totalmente justificada, no
puede ser respondida con balas; agregamos
que si bien el electorado (no hablemos
de pueblo aquí) ha sido sistemáticamente
engañado, defraudado o estafado desde que el voto popular adquirió alguna
importancia (precisando, desde
1962) NUNCA
lo ha sido
tanto como en
estas últimas elecciones
por lo tanto, la frustración, indignación o rabia son,
justificadamente, mayores que
nunca. No sólo esto, la represión
asesina es también mayor que nunca. Si
descontamos el genocidio de los penales perpetrado por orden de garcía a poco
de asumir el poder, ningún presidente se dio el “lujo” de reposar sobre una
docena de cadáveres antes de cumplir doce meses en el cargo
en este ambiente en el que se da esta represión con ya más
de una docena de asesinados y cientos de heridos, calificar de “ofensivo”el
cartel que se reproduce en la p. 4 (donde aparece u-mala de trasvessti) es una
estupidez o esconde alguna intención criminalmente represiva. Una ofensa debe
ser respondida, con una sanción o con un castigo y se dice que hay ofensas que
sólo se borran con sangre; se está pidiendo eso cuando se habla de cartel
“ofensivo”? Habrá que ametrallar a esa
multitud tan “ofensiva”, tan atrevida, tan subversiva?
son muy pocas las ocasiones en las que, debajo de la
inmaculadamente nívea piel de oveja que suele llevar nuestro semanario
favorito, se asoman las negras orejotas del feroz lobito hitlerbravo; ésta ha
sido una de ellas y hay que hacerlo notar
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